Con esta carta abierta, Shark Citizen se dirige a empresas de las industrias cosmética y farmacéutica (complementos alimenticios) que utilizan en la composición de algunos de sus productos compuestos de tiburones, incluidos, entre otros, tiburones extremadamente amenazados. Por ejemplo, descubrimos que la marca OMOJO proviene de una empresa que a su vez suministra escualeno de una fábrica asiática que explota 600 tiburones ballena al año, según la ONG WildLifeRisk.
Shark Citizen lanza su campaña de tiburones y consumidores.
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1 comentario
excelente demostración!
¡bravo